Era el verano de 2010 y estaba el Efesé sin fichajes. La afición, eufórica por el ascenso a Segunda y el temporadón hecho, se desesperaba por otra parte porque los fichajes no llegaban.
Todo eran rumores, que si había que esperar a última hora, a que los “grandes” hicieran sus descartes, que era mejor aprovechar las oportunidades, las gangas… y los sufridos aficionados del Efesé, tirándose de los pelos porque no llegaba nadie. A mí llegaba a molestarme la insistencia de la afición, mejor dicho de algunos aficionados, que más que exigir o pedir parecían mendigar algún fichaje.
Este montaje de fotochó es uno de esos prontos que tengo y que no sé a qué obedecen; de repente se me ocurre algo y tengo que hacerlo. Sólo así se me quita la manía.
En espera de descartes.
