Recordé la revista de humor deportivo Barrabás, que se publicaba (y yo devoraba) a mediados de los años 70.
En ella dibujaban Óscar e Ivá, y hacían el resumen de los partidos de cada jornada. Con dibujos sencillos, rápidos, y me dio esta mañana por hacer uno de ese estilo mientras tomaba el primer café del día.
Todavía tengo revistas de aquella época. Aquí, un ejemplo:
Lo tengo muy callado, pero soy adivino, de los buenos, de los que fallan poco o nada. Tengo mi bola de cristal y todo.
Voy a poner un ejemplo, lejano pero válido. Allá por 2010, a fines de febrero, se me ocurrió volver a dibujar viñetas de fútbol, como ya había hecho antes en diversas ocasiones y para publicaciones diferentes. Pero en esta ocasión iba a ser digital.
Había salido al mercado el diario digital Sportcartagena, dirigido por mi amigo Manuel Ángel Balaguer. Le llamé, le pregunté si le interesaban mis colaboraciones y no lo dudó, me dijo que encantado, de modo que me puse manos a la obra y al rato le envié mi primera aportación, que es la que reproduzco aquí.
El globo que, según los pimentoneros, se desincharía
El Efesé, por entonces, marchaba muy bien, estaba incluso en posición de ascenso, tercero, detrás del Hércules y la Real Sociedad (en aquella época ascendían 3 directos).
Nuestros vecinos del otro lado del Puerto de La Cadena estaban un poco peor, y andaban jodiendo con aquello que éramos un globo que acabaría desinchándose, que nuestro estadio era como un futbolín, etc.
Por eso hice la viñeta del globo, con dos jugadores de la tierra: Yuste y el capi Mariano Sánchez (¿se acuerdan cuando había algún jugador cartagenero en el Cartagena? ¡Qué tiempos!)
Y Mariano decía que «Murcia» le sonaba… algo allá abajo, entre Castellón y Cádiz, cerca de Irún. Aquel despropósito geográfico, sin embargo, era acertadísimo en lo futbolístico. Meses después, en junio de aquel año, descendieron a Tercera -aunque eufemísticamente se le llamaba Segunda B, igual que podían haberla llamado Primera C- el Murcia, el Castellón, el Cádiz y el Real Unión de Irún. Lo clavé, vamos.
El Efesé no ascendió a Primera, obviamente; quedó en el 5º puesto, pero el globo no se desinchó.
Hacía tiempo que no dibujaba nada del Efesé. No me apetecía, son muchas decepciones seguidas. Creo que fue hace más de dos años cuando hice algo en este blog.
Hoy el Murcia le ha ganado por 2-0 pero lo peor no ha sido la derrota, que ya es mala perder con los pimentoneros, sino cómo se ha perdido.
Un cactus, o cacto, es una planta que se mueve poco, por no decir nada. Florece poco, por no decir nada.
Tan raras son sus flores que algunas tienen una vida de un solo día. El término “Flor de cactus” es sinónimo de algo efímero, fugaz. Un cactus es una planta simpática, a pesar de sus espinas, porque resiste, requiere pocos cuidados, la colocas en un sitio y, normalmente, queda bien.
Pero si hay algo que caracteriza bien a un cactus es que son capaces de vivir de las rentas como ninguna otra planta. Almacenan el agua mucho mejor que los camellos, que son capaces de atravesar desiertos. Los cactus no es que los atraviesen, es que viven en ellos. Llega un pequeño chaparrón y guardan esa agua, la administran, la racionan, y viven de ella largas temporadas de sequía hasta que llegue otra pequeña nube que calme la sed.
Digamos que un cactus no es brillante y colorido como una rosa, no enamora como una orquídea, no hace vibrar como los geranios, no te pone alegre como las sencillas margaritas, ni siquiera perfuma como un modesto jazmín. No. Un cactus es práctico, aguanta, resiste. Aunque, eso sí, aburre hasta a las ovejas.
Y, a veces, los cactus también llegan a ser entrenadores de fútbol. El entrenador de Cartagena podría ser un caso.
Nota: 8 de Octubre de 2017. Marbella 1 – Cartagena 0. El Efesé está en mitad de la tabla, han pasado los meses, sigo pensando lo mismo.
Ver al FC Cartagena líder varias jornadas seguidas era un sueño poco habitual y, claro, teníamos que despertar. Se han encargado de ello unos oportunos arbitrajes que han hecho una escabechina de tarjetas rojas a jugadores, entrenador y segundo entrenador y han desmantelado al equipo. Y ya están aquí los fantasmas. ¿Hay alguien a quien molesta que el Efesé pueda ascender? ¿Se han dado instrucciones a alguien por parte de alguien para que alguien solucione eso? Seguro que sólo son fantasmas.
Cosecha de tarjetas rojas para el Efesé
Lo malo es que los fantasmas, como las meigas, no existen. Pero, haberlos, haylos.
Hay una frase famosa que te invita a aceptar lo que te depare el destino sacando lo mejor de él y dice «Si la vida te da limones, haz limonada».
Pero hay otra opción mejor, que es la que ha hecho el F.C. Cartagena, a quien el destino le ha puesto en su camino a Jesús Reguillos Moya, «Limones», y lo que ha conseguido es un portero de lujo.
Limones, portero del Efesé
También es cierto que en la última temporada 2016-2017 está cantando tanto en algunos partidos que hay quien dice que suena para Eurovisión.
Esta temporada, al menos al inicio, los goles al FC Cartagena le caen «antes que se presinaun cura loco», como se diría en el habla icue. En tres partidos de los seis primeros jugados, o sea un 50%, ha encajado un gol en el minuto uno. Y eso no es normal ni para el pupas Efesé.
Así lo vi para Sportcartagena.es antes de que se jugara el encuentro siguiente contra el Almería B.
Viñeta publicada en Sportcartagena.es el 4/10/2013.