Vahanero. La he buscado y no, tampoco la encuentro en otra parte. Ni su origen.
Es otra palabra propia del habla de Cartagena, ya en desuso, también es cierto.
Quizá ya no se utiliza mucho porque tiene multitud de sinónimos donde elegir: bellaco, truhán, granuja, tunante, bribón, rufián, canalla, sinvergüenza, ladrón, delincuente y algunas más que me dejo en la CPU.
Y habiendo tanto donde elegir, me pregunto ¿qué necesidad tenían mis ancestros cartageneros de sacarse de la chistera otra palabra más para el mismo concepto? Y tan rara, además: vahanero. Ninguna, supongo.
Los cartageneros tienen, tenemos, muy a menudo, ese punto absurdo y surrealista que nadie entiende. Ni nosotros mismos.