Hace algún tiempo escribí sobre El Hombre Que Mira y en aquella entrada ya dije que este extraño ser, cuando llega el mal tiempo, su patrón, o padrino, o lo que sea, se apiada de él y lo abriga un poquito.

Ahora que llega el invierno (Winter is coming, domo dirían en Juego de Tronos) y los días refrescan, ha llegado el momento de ponerse, al menos, unos calcetines. Después llegarán las bufandas y el gorrito de Navidad. En su tiempo, claro.
Por cierto, falta un mes justo para Nochebuena.